Según la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria no existe ninguna prueba ni evidencia de que los alimentos sean fuente de transmisión del COVID-19.
Ante la nueva situación de emergencia creada por la aparición del coronavirus o COVID-19 y, ante las medidas excepcionales que se están llevando a cabo para intentar frenar o ralentizar lo que la OMS ha declarado ya como una pandemia, resulta tranquilizador saber que el coronavirus no se transmite a través de los alimentos.
La EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria) ha asegurado que no existe evidencia de que el virus se propague a través de la ingesta de alimentos y ha recordado que la forma de transmisión es a través de gotas respiratorias, de persona a persona.
La experiencia adquirida con el manejo de los brotes de otros coronavirus como el SARS-CoV, síndrome respiratorio agudo severo, o el MERS-CoV, síndrome respiratorio de Oriente Medio, apuntan a que no se produce la transmisión del virus por la comida y hasta todo parece indicar que el COVID-19 es similar en este sentido. Por lo tanto no existen ninguna prueba ni evidencia de que los alimentos sean fuente de transmisión del virus.
No hay ni un solo informe, de todos los que actualmente están monitorizando la enfermedad en el mundo, que haya evidenciado o detectado este tipo de transmisión, han asegurado desde esta agencia, por lo que en este sentido podemos estar tranquilos.
Y ya que se recomienda que pasemos el máximo tiempo posible en casa podemos aprovechar para cocinar y hacerlo también con los más pequeños de la casa. ¡Hay que pensar en positivo!